Tumor en la hipófisis: medicamentos

Para algunas clases de tumores en la hipófisis, es posible que los medicamentos sean el único tratamiento necesario.

¿En qué casos podrían usarse medicamentos para tratar los tumores en la hipófisis?

En ciertos casos de tumores hipofisarios pequeños, es posible impedir que el tumor crezca con medicamentos. O se pueden usar medicamentos para evitar que produzcan hormonas que afectan otras partes del cuerpo.

Los tumores no se pueden destruir por completo con medicamentos. Pero se puede controlar la producción de hormonas. Y, en algunos casos, se puede reducir el tamaño del tumor.

¿Qué tipos de medicamentos se usan para tratar los tumores en la hipófisis?

Se usan muchos tipos distintos de medicamentos para tratar estos tumores. El tipo de medicamento que se use depende del tipo de tumor hipofisario. También depende del tipo de hormona y de la cantidad que produce el tumor.  

Tumores que producen prolactina

En general, estos tumores se tratan con medicamentos que impiden que produzcan prolactina y reducen el tamaño del tumor o impiden que crezca. Muchas veces, los medicamentos agonistas de la dopamina son el único tratamiento necesario. Los siguientes son los medicamentos que se usan con más frecuencia. Se toman como pastillas:

  • Cabergolina

  • Bromocriptina

Después de unos meses de tratamiento, le harán pruebas para ver si el medicamento está funcionando. Se hacen análisis de sangre para medir los niveles de prolactina. También es posible que le hagan una resonancia magnética para ver el tamaño del tumor.  

A veces, el tumor desaparece y se puede dejar de tomar el medicamento. Pero estará bajo observación permanente para ver si reaparece. En otros casos, tiene que usar los medicamentos por el resto de su vida.

Tumores hipofisarios que producen somatotropina u hormona del crecimiento

Por lo general, estos tumores se tratan primero con cirugía. Si los niveles hormonales siguen siendo altos después de la cirugía, pueden usarse medicamentos análogos de la somatostatina. Estos medicamentos se administran mediante inyecciones:

  • Octreotida

  • Lanreotida

  • Pasireotida

  • Pegvisomant (puede usarse un antagonista de la hormona del crecimiento si estos otros medicamentos no funcionan)

También pueden tomarse dosis altas de cabergolina o bromocriptina (ambos son pastillas) junto con uno de estos medicamentos.

Tumores que producen corticotropina (ACTH)

Por lo general, estos tumores se tratan con cirugía y a veces con radioterapia. Dado que la radioterapia puede tardar mucho tiempo en hacer efecto, mientras tanto pueden usarse medicamentos. Pero los medicamentos por sí solos no son eficaces para estos tipos de tumores. Y suelen tener efectos secundarios graves si se toman durante mucho tiempo. Los medicamentos que pueden usarse incluyen los siguientes:

  • Ketoconazol (pastilla)

  • Mitotano (pastilla)

  • Metirapona (pastilla)

  • Osilodrostat (pastilla)

  • Aminoglutetimida (pastilla)

  • Pasireotida (inyección)

  • Etomidato (inyección)

  • Mifepristona (pastilla)

Si estos medicamentos no funcionan, puede probarse la cabergolina o la bromocriptina (ambos son pastillas).

Tumores que producen gonadotropina (FSH/LH)

Las hormonas que producen estos tumores muy poco frecuentes no causan ningún síntoma. Suelen detectarse cuando son grandes y causan problemas al presionar los nervios y el cerebro. Debido al tamaño, los tratamientos preferidos son la cirugía y quizá después la radioterapia. Le harán exploraciones por imágenes periódicas para ver si el tumor reaparece. Si la radioterapia y la cirugía no funcionan, podrían administrarse estos medicamentos:

  • Cabergolina (pastilla)

  • Bromocriptina (pastilla)

  • Octreotida (inyección)

  • Lanreotida (inyección)

Tumores que producen tirotropina (TSH)

Estos tumores poco frecuentes se tratan con cirugía y quizás después con radioterapia. Si todavía se produce demasiada tirotropina, pueden requerirse medicamentos. Los medicamentos que se usan con más frecuencia son los siguientes:

  • Octreotida (inyección)

  • Lanreotida (inyección)

  • Cabergolina (pastilla)

  • Bromocriptina (pastilla)

Tumores que no producen hormonas

Estos tumores no suelen causar problemas hasta que son grandes. La cirugía y la radioterapia son los primeros tratamientos en usarse. Pero si no funcionan, pueden usarse los siguientes medicamentos para intentar frenar el crecimiento de estos tumores:

  • Cabergolina (pastilla)

  • Bromocriptina (pastilla)

  • Octreotida (inyección)

  • Lanreotida (inyección)

  • Pasireotida (inyección)

¿Cuáles son los efectos secundarios comunes de los medicamentos usados para tratar los tumores en la hipófisis?

Los medicamentos usados para tratar los tumores en la hipófisis pueden provocar efectos secundarios. Los efectos secundarios dependen del medicamento que se use y de la dosis. Pueden incluir, por ejemplo, lo siguiente:

  • Malestar estomacal (náuseas)

  • Mareos

  • Cansancio

  • Vómitos

  • Diarrea o estreñimiento

  • Depresión

  • Dolor de cabeza

Otros efectos secundarios más graves, pero menos comunes, son los siguientes:

  • Problemas con las válvulas del corazón

  • Cálculos biliares

  • Diabetes

  • Daño hepático

Colabore con el proveedor de atención médica

Es importante saber qué medicamentos usa. Anote los nombres de los medicamentos que debe usar y pregunte al equipo de atención médica cómo actúa cada uno y qué efectos secundarios podrían provocar.

Hable con los proveedores de atención médica sobre los signos a los que debe estar atento y controlar, y cuándo debe llamar. Por ejemplo, algunos medicamentos provocan náuseas y vómitos, que se pueden tratar. Asegúrese de saber a qué teléfono llamar si tiene preguntas. ¿Hay una línea telefónica diferente para llamar durante la noche, los fines de semana y días festivos?

Puede ser útil llevar un registro de sus efectos secundarios. Escriba cualquier cambio que note, ya sea físico, del pensamiento o emocional. Tener una lista por escrito hará que le resulte más fácil recordar las preguntas cuando concurra a las citas. También les facilitará a usted y al equipo de atención médica colaborar en el armado de un plan para controlar los efectos secundarios.

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