Si el proveedor de atención médica considera que puede tener cáncer de hígado, tendrá que hacerse determinados exámenes y pruebas para estar seguro. El proceso comienza con algunas preguntas por parte del proveedor de atención médica. Le preguntará acerca de su historia clínica, de los síntomas, de los factores de riesgo y si tiene antecedentes familiares de la enfermedad. También le hará una exploración física.
¿Qué pruebas podría necesitar?
Es probable que deba realizarse una o más de las siguientes pruebas:
Análisis de sangre
Los análisis de sangre ayudan a su proveedor de atención médica a tener una idea de su salud general. Algunos pueden ayudar a buscar signos de cáncer de hígado.
Análisis de sangre de alfafetoproteína (AFP)
La AFP es una proteína en la sangre. Los niveles de AFP suelen ser altos en personas con cáncer de hígado. Pero otras afecciones también pueden elevar los niveles de AFP. Por lo tanto, esta prueba por sí sola no puede usarse para diagnosticar el cáncer de hígado.
Pruebas de la función hepática (LFT)
En estas pruebas, se puede ver irritación e inflamación del hígado. Estas pruebas pueden mostrar irritación e inflamación del hígado. Pero si las pruebas muestran daño hepático, es probable que su proveedor de atención médica realice otras pruebas para buscar la causa del daño. El daño podría deberse a muchas cosas diferentes, como cirrosis, hepatitis o cáncer.
Pruebas de diagnóstico por imágenes
También pueden hacerle pruebas de diagnóstico por imágenes para detectar cáncer de hígado.
Ecografía
Esta suele ser la primera prueba que se realiza si su proveedor de atención médica sospecha que hay cáncer de hígado. Una ecografía es fácil de hacer y no se utiliza radiación. Es ideal para mostrar si un tumor de hígado es un saco lleno de líquido (quiste) que probablemente no sea cáncer, o una masa sólida que tiene más probabilidades de ser cáncer. En una ecografía, se usan ondas sonoras para buscar cambios en el hígado. Las ondas sonoras rebotan en su interior y envían un conjunto de señales. Las señales se pueden convertir en imágenes a través de una computadora.
Resonancia magnética
En esta prueba, se crean imágenes detalladas del hígado y los órganos cercanos. Para esta prueba, se utilizan imanes y ondas de radio para crear imágenes del interior del cuerpo. En las resonancias magnéticas, se pueden observar más detalles que en otras pruebas de diagnóstico por imágenes. Es posible que le coloquen un medio de contraste en la sangre a través de una vena antes de este examen. El tinte permite obtener imágenes más claras.
Tomografía computarizada
En una tomografía computarizada, se utilizan rayos X tomados desde muchos ángulos. Esto crea imágenes de secciones transversales muy detalladas del hígado y de los tejidos cercanos.
Biopsia
Si en una prueba de diagnóstico por imágenes se observa algo en el hígado que parece ser cáncer, el proveedor de atención médica puede extraer trozos pequeños (llamados muestras) del tejido alterado. Esto se denomina biopsia. Luego, un patólogo, un proveedor de atención médica que se especializa en observar células, revisa las muestras para determinar si hay cáncer allí. Una biopsia es la única forma de saber con seguridad que las alteraciones se deben a un cáncer. Hay varias formas de hacer una biopsia. Por ejemplo:
Biopsia con aguja
Se introduce una aguja delgada y hueca a través de la piel. Se introduce en el tumor del hígado para extraer una pequeña porción. Una biopsia con aguja normalmente se realiza durante una tomografía computarizada o una ecografía. Gracias a las pruebas de diagnóstico por imágenes, el proveedor de atención médica puede asegurarse de que la aguja entre en el tumor.
Biopsia laparoscópica
Durante la laparoscopia, se hacen pequeños cortes en el abdomen. Luego, su proveedor de atención médica coloca herramientas quirúrgicas largas en esos cortes. Una de estas herramientas tiene una pequeña cámara de video iluminada en el extremo que proyecta imágenes en una pantalla. Esto le permite al proveedor observar la superficie del hígado y de los órganos cercanos. Si se observan tumores o áreas modificadas, las herramientas colocadas en los otros cortes se pueden usar para tomar muestras a fin de realizar pruebas.
Biopsia quirúrgica
Este es el tipo más común de cáncer de hígado. En este caso, el tejido para la biopsia se extrae durante la cirugía para extirpar el tumor.